
¿Te has preguntado “qué hacer si mi perro no quiere comer”? Es normal preocuparse cuando tu fiel compañero rechaza la comida. La falta de apetito (anorexia canina) puede tener causas simples como estrés, cambios en el entorno o dieta, y otras más graves. En esta guía descubrirás cómo identificar el motivo, cuándo debes actuar, y qué pasos tomar para que tu perro recupere su apetito y bienestar.
¿Por qué no come mi perro? Causas más comunes
- Estrés o cambios en la rutina
Mudanzas, nuevos miembros en casa (humanos o mascotas), ruidos fuertes… todo esto puede alterar su apetito. - Dieta inapropiada o falta de palatabilidad
Si la comida no le atrae o está en mal estado, la rechazará. Intenta variar proteínas o presentación. - Problemas dentales o bucales
Dolor por caries, encías inflamadas o dientes rotos puede hacer que evite comer. - Infecciones o enfermedades sistémicas
Virus, bacterias, parásitos o enfermedades como insuficiencia renal, hepática o pancreatitis. - Medicamentos o vacunas recientes
Algunos tratamientos pueden causar falta de apetito como efecto secundario temporal.
Pasos iniciales: ¿qué hacer si mi perro no quiere comer?
1. Observación detallada
– Anota duración del ayuno (¿qué tan largo lleva sin comer?)
– ¿Bebe agua? La deshidratación es grave.
– ¿Muestra otros síntomas?: vómitos, diarrea, letargo, fiebre.
2. Ajustes en casa
– Ofrece comida fresca en un lugar tranquilo.
– Calienta ligeramente su ración: potencia el aroma.
– Mezcla con caldos bajos en sal (sin cebolla/ajo) o un poco de pollo hervido sin especias.
3. Cambia de alimento gradualmente
– Introduce una dieta blanda temporal (arroz con pollo ligero).
– Aumenta gradualmente volumen y frescura, regresando al pienso habitual en 3–5 días.
4. Establece una rutina regular
– Horarios fijos de comida.
– Evita dejar comida disponible todo el día (“hay comida 24/7”): actívalo solo en 20 minutos y retira lo no consumido.
¿Cuándo consultar al veterinario?
Busca atención profesional inmediatamente si:
- Lleva más de 48 horas sin comer, especialmente cachorros y perros mayores.
- Presenta vómitos recurrentes, diarrea constante, fiebre o dolor abdominal.
- Hay síntomas extra como tos, cojeras, letargo extremo.
- Rechaza también el agua: riesgo de deshidratación grave.
El veterinario podrá realizar examen físico, análisis de sangre, orina, rayos X o ecografía.
Tratamientos y soluciones profesionales
- Investigación médica completa
Diagnóstico preciso usando pruebas sanguíneas, bioquímicas, parasitológicas, imagenología. - Tratamiento de la causa raíz
Antibioterapia, antiparasitarios, cuidados dentales, tratamiento de insuficiencia orgánica, etc. - Terapia de apoyo
- Medicamentos estimuladores del apetito (como mirtazapina o capromorelin)
- Fluidoterapia si está deshidratado
- Dieta terapéutica especializada
Cuidados en casa y dieta recomendada
- Alimenta con dieta blanda (pollo, arroz, calabaza) en porciones pequeñas y frecuentes.
- Ofrece probióticos para mejorar digestión.
- Mantén rutina de ejercicio moderado para estimular apetito.
- Controla el peso regularmente para prevenir la pérdida.
- Lleva registro diario de comida ingerida y síntomas para mostrar al veterinario.
Enlaces recomendados
- Consulta veterinaria: Asociación Colegial Veterinaria de España
- Dietas caseras equilibradas: Blog especializado de nutrición canina
Conclusión
Saber qué hacer si mi perro no quiere comer implica observar con atención, ofrecer alternativas caseras, mantener una rutina alimentaria y, sobre todo, saber cuándo acudir al veterinario. Tu perro dependerá siempre de tu respuesta rápida y eficaz. Con este plan, podrás:
- Detectar causas comunes y actuar temprano,
- Mejorar su dieta y entorno para estimular el apetito,
- Conservar un buen vínculo emocional y bienestar general.